Seguridad
En el diseño de las estaciones se ha eliminado cualquier recoveco a lo largo del recorrido y se ha incorporado uno de los elementos más innovadores en esta materia dentro del transporte ferroviario: el sistema de puertas andén. Este sistema consiste en unas mamparas de seguridad que separan el andén de la vía y disponen de unas puertas que se abren y cierran de forma sincronizada con la de los trenes. De esta forma, se elimina cualquier riesgo de caída de los usuarios que se encuentren en el andén hacia las vías y disuade a los pasajeros de cambiar de vía en las estaciones con andenes laterales.
Funcionalidad
La elección de los materiales de las terminaciones, así como del revestimiento del interior se han adecuado a un concepto arquitectónico sencillo, desde el punto de vista formal y estructural, que prima la seguridad, la funcionalidad y el confort del usuario, así como la accesibilidad de las estaciones, que incorporan las máximas exigencias en materia de personas de movilidad reducida.
El interior de las estaciones constituye un espacio diáfano y armónico, para lo cual se ha optado por un diseño monocromático que incorpora un mobiliario funcional y una iluminación cálida en todo el recinto.
Con estos criterios, se persigue la creación de un espacio sosegado y exento de cualquier elemento perturbador que garantice una movilidad ágil y una actitud serena en el interior de las estaciones.
Accesibilidad
Todas las estaciones subterráneas, semisoterradas o ubicadas en estructuras elevadas incorporan medios mecánicos (ascensores y escaleras mecánicas) de acceso en los diferentes niveles de la estación. Igualmente, la diferencia entre la solería del andén y el carríl de la vía es mínima de forma que elimine cualquier obstáculo para la subida al tren de las personas con movilidad reducida.
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